Desarrollo de Competencias

Primeros Días Clases

Primeros Días de Clases

Compartimos algunas imágenes de los primeros días de clases. Los plateritos estamos muy contentos de estar de vuelta. Algunos de los más pequeños aún estamos adaptándonos, mientras que otros ya hemos encontrado nuestro ritmo y disfrutamos al máximo de esta nueva aventura escolar.

La comunidad del Jardín Platero sigue creciendo con ilusión y compromiso. Nuestros primeros días han estado llenos de sonrisas, juegos, y momentos únicos que nos recuerdan la importancia de aprender en un entorno de cariño y respeto. Creemos firmemente en el potencial de cada uno de nuestros niños y niñas, y para ello, trabajamos de la mano con las familias para construir un año lleno de logros y experiencias significativas.

Primeros Días ClasesEn este regreso, queremos reforzar un enfoque clave en nuestra comunidad educativa: la Disciplina Positiva. Esta metodología, basada en el respeto mutuo y la empatía, nos ayuda a guiar a los niños y niñas hacia la autorregulación, la cooperación y el desarrollo de una autoestima sólida. Al promover un ambiente donde se sienten seguros para explorar, cometer errores y aprender de ellos, fomentamos no solo su desarrollo cognitivo, sino también su bienestar emocional.

Algunas prácticas de Disciplina Positiva que ya están presentes en nuestras aulas y que queremos destacar:

  1. Los acuerdos y rutinas: Establecemos reglas claras y colaborativas, involucrando a los niños en la creación de rutinas que promuevan la autonomía. Por ejemplo, ellos mismos eligen el orden de sus actividades de la jornada, fomentando así el sentido de pertenencia.
  2. El refuerzo positivo: Celebramos no solo los logros grandes, sino también los pequeños esfuerzos. Cada gesto de amabilidad entre compañeros o un intento valiente de probar algo nuevo se convierte en motivo de reconocimiento.
  3. La solución de problemas en equipo: Cuando surge un conflicto, no castigamos, sino que trabajamos juntos para buscar soluciones. Enseñamos a los niños a expresar lo que sienten y a comprender los sentimientos de los demás, fortaleciendo sus habilidades de resolución de problemas.
  4. El rincón de la calma: Un espacio tranquilo dentro del aula donde los niños pueden ir a relajarse y regular sus emociones cuando lo necesiten. Esta herramienta es una forma práctica y efectiva de enseñarles a manejar sus emociones desde pequeños.

Este enfoque no solo está presente en la vida diaria del Jardín Platero, sino que también queremos compartirlo con las familias, para que juntos podamos ser consistentes en casa y en el colegio. Los invitamos a formar parte de talleres sobre Disciplina Positiva que estaremos organizando este año.

Estamos felices de reencontrarnos y listos para construir un año repleto de aventuras, aprendizajes y momentos inolvidables. Seguimos comprometidos con nuestros valores de respeto, empatía y trabajo en equipo, celebrando a cada uno de nuestros plateritos por el ser único y especial que es.

Así que a disfrutarlo juntos, con mucha alegría, porque este año será una experiencia inolvidable para todos.

Para conocer más sobre la disciplina Positiva, los invitamos a leer el este artículo escrito por la Lic. Manuela Caminal, psicóloga especialista en Disciplina Positiva.

Disciplina Positiva en el Jardín Platero

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Competencia Emocional

En el Jardín Platero ofrecemos a nuestros alumnos diferentes oportunidades de desarrollar la competencia emocional y social.
Una experiencia muy enriquecedora es trabajar desde pequeños el trabajo colaborativo que los invita a sumar esfuerzos para conseguir el mismo objetivo, poniendo en juego el compromiso personal y el respeto por las ideas de los demás.
El juego del Saltamontes les divierte mucho y de manera vivencial van aprendiendo a trabajar colaborativamente.

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Aprender Jugando: tan importante para un niño.

Aprender jugando es la clave del desarrollo infantil. El juego es la actividad más importante en la vida de un niño.

Parafraseando a Tonucci, los niños deben tener tiempo real para jugar, ellos necesitan recrear su historia, sus roles, en fin, tener algo para contar.

Es por esta razón que en un modelo de educación 360 permitir a los niños y a las niñas el juego libre o proponerles distintas formas lúdicas es una tarea primordial para el docente

Asimismo, la profesora de Jardín, en su rol de mediadora de los aprendizajes, debe jugar con el niño y de esta manera establecer un vínculo basado en el cariño y la confianza mutua.

Los espacios de juego socializante son prioridad en el jardín

El niño jugando desarrolla toda su fantasía, explora, intercambia experiencias, propone, aprende a aceptar a los demás. en definitiva, es el ámbito natural para el desarrollo de la dimensión social

Junto a su grupo de pares, y jugando con ellos a las distintas formas de juego, según la etapa del desarrollo que atraviesan, aprenden la confianza en sí mismo y en los demás, experimentan el tener que pedir ayuda, practican hábitos buenos en pos de la adquisición de virtudes tales como la sinceridad, honradez, respeto por las diferencias, tolerancia, solidaridad, responsabilidad, paciencia y empatía, entre otras-

El juego y la competencia comunicativa

Hasta aquí hemos dicho que el juego es el vector fundamental para el desarrollo social, afectivo y emocional en la infancia, pero también lo es para el desarrollo de la competencia comunicativa.

En la acción de comunicarse intervienen varios elementos, uno de ellos es el mensaje que tanto emisor como receptor deben conocer. Ese mensaje puede transmitirse utilizando diversos códigos verbales y no verbales. El lenguaje hablado y escrito forman parte de los verbales.

Las diversas formas de juego ofrecen a los alumnos la oportunidad de desarrollar lenguaje ampliando el vocabulario, generando frases pertinentes a lo que se quiere comunicar, y en el caso de un modelo bilingüe como el nuestro, desarrollar la segunda lengua.

Los juegos del lenguaje, ofrecen la oportunidad de desarrollar la Conciencia Fonológica (la capacidad de discriminar que a cada sonido hablado le corresponde uno escrito), va adentrándolo en el apasionante mundo de la lectura y escritura.

La comunicación también implica saber escuchar saber expresar las propias ideas con palabras adecuadas

Otra forma de comunicación que el niño aprende a través del juego es el lenguaje no verbal que implica una forma de comunicación que se genera a través de gestos, de movimientos corporales, que no necesita palabras, pero es perfectamente comprensible por el otro.

La literatura es otra forma de juego, escuchar poesías, trabalenguas, relatos, cuentos narrados por adultos o por otros niños, explorar libros, o escuchar leer al adulto genera en el niño un gran placer que le abre un mundo fantástico y potencia sus formas de jugar.

 

 El juego y el desarrollo motriz 

Otro aspecto que da valor a las actividades lúdicas es el desarrollo neuromotor.

Los juegos que implican movimiento y le permiten a los niños correr, saltar, gatear, arrastrarse, trepar, son las actividades qué más los divierten y que favorecen las conexiones neuronales, favoreciendo de esta manera el desarrollo de habilidades motrices, estrechamente ligadas a las habilidades intelectuales.

Muchos autores coinciden en que el juego es la base del desarrollo intelectual de los niños y niñas. Durante el juego, los adultos dan soporte afectivo y emocional mientras que los menores se convierten en protagonistas de sus propios procesos de aprendizaje.

En la actualidad también cobran relevancia los juegos digitales, que orientados hacia el desarrollo de capacidades y habilidades, y mediados por el adulto, ofrecen al niño una amplia gama de posibilidades creativas

Por todo esto cada día en el Jardín es valiosísimo, aunque seguimos afirmando, y cada día con más fuerza, que los padres son los primeros educadores y el jardín complementa la acción educativa familiar.

Cada momento que dedicamos a jugar con nuestros hijos es valiosísimo, en si mismo y como recuerdo para el futuro.

En casa no dejemos de jugar con nuestros hijos:

  • Compartir actividades cotidianas como cocinar, arreglar el jardín, lavar el auto, son actividades lúdicas si así se lo hacemos ver a los chicos.
  • Leerles a la noche, o en cualquier momento del día,
  • Juegos de mesa
  • Expediciones por la casa, la cuadra de nuestro barrio.
  • Fabricar juguetes, jugar a lo que ellos nos proponen.
  • Hacer experimentos, disfrazarnos…

Estas ideas son solo disparadores, te proponemos que completes esta larga lista jugando con tus hijos e hijas a lo que a vos te gustaba jugar de pequeño, o a lo que a tu hijo le gusta jugar.

Sandra Tempra

Directora Jardín Platero

Apdes Mendoza

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